"Estaban la mente, el miedo y la risa discutiendo sobre cuál sería el siguiente paso. Se adelantó el miedo diciendo:
¡Cuidado!
No vayamos a dar un paso en falso. En mi prudente opinión, deberíamos
quedarnos aquí, esto ya lo conocemos, así, no pasará nada malo.
La mente consideró el argumento del miedo y se puso a hablar para ella misma:
Debemos dar
un paso ¿sí o no?. ¿Digo que sí o digo que no?. Si digo que sí, ¿por
qué no?, ¿y si digo que no porque sí?. ¿Y si no digo ni que no ni que
sí?, ¿entonces que digo?, ¿hay otras posibilidades? Sí o no. Si digo que
sí, ¿por qué no?, ¿y si digo que no porque sí?. ¡Qué rollo esto del sí o
no!, ¿a que sí?. ¿Y por qué sí?. A lo mejor es no y yo estoy creyendo
que sí.
¡¡Síiii!.....
o no. Ya estamos otra vez, en fin, ¿qué posibilidades tengo de resolver
este enigma sin dar círculos constantemente?. Pero... ¿existe enigma?
sí o no.
Vale pues sí, ¿pero sí a qué?, no lo sé, entonces no. Decidido, mi respuesta será NO.
Síiiiiii - aplaudió el miedo.
Ahora
contestaré NO a todas mis preguntas, ¡qué tranquilidad da el saber la
respuesta de antemano!. Así no hay que pensar, no hay duda, no hay
incertidumbre, no hay riesgos, estaré tranquilo porque no habrá nada
malo que me sorprenda.
Ahora que
tengo la respuesta buscaré las preguntas que me indiquen sobre el
siguiente paso..........Ah!, se me ocurre una, ¿es bueno tener la
respuesta elegida de antemano?.
Llegada a esta situación, la mente y el miedo quedaron desconcertados por la contradicción, y encima, mientras ellos estaban preocupados por el siguiente paso, la risa reía.
- Ja ja ja ja ja ja, .. Jajajajajaja,..... jajajajaja
La risa reía y reía cada vez más fuerte y durante más tiempo, tanto que la mente y el miedo dejaron de oírse entre sí. Con el tiempo empezaron a aburrirse hasta alcanzar la apatía.
La risa: reía y reía...... reía y reía.
Finalmente, la risa decidió tomarse un respiro y todo quedó en calma. Desde este silencio, desde el más profundo silencio, mientras el miedo y la mente dormían, el siguiente paso, simplemente, ocurrió".
FIN
Muy bonito este pequeño cuento y ¡tan real!
ResponderEliminarEl gran poder de la risa para acallar la mente y relativizar el miedo,y permitirnos ir hacía adelante como una magia renovadora...Gracias.
Has dado en la clave,que bien narrado, ! Gracias !
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